26 oct 2016

Big Data al servicio de la represión

Somos transparentes y previsibles. En Internet lo somos aun más. Google nos cataloga como consumidores y nuestra actividad, tal como comentamos en el último post, genera riqueza para estas empresas. Así, a pesar de no pagar nada, su uso no es gratuito: pagamos con nuestra intimidad y cedemos  nuestro perfil social que es vendido en nuestro nombre al mejor postor. 

Por su parte, los gobiernos puede utilizar nuestra actividad en la red para clasificarnos como masa fiel o insurrectos. Nuestra actividad en twitter o facebook tiene sus consecuencias. En concreto, China intenta implantar un sistema de catalogación de información que clasifique a los ciudadanos o a las empresas según su fidelidad hacia el régimen y, partir de este particular ranking, premiar o castigar la disidencia o la convergencia. Sin duda, la digitalización de los patrones de comportamiento permite   establecer, en base a una serie de criterios básicos, el posicionamiento del internauta. Y para un gobierno, internet es una herramienta de control del pensamiento tan eficaz que Orwell no hubiera podido encontrar un mejor sistema: una herramienta que permite controlar la difusión de la información y, por lo tanto, del pensamiento. Y es a tiempo real y con una pasmosa facilidad de gestión y tratamiento. Así pues, bajo esta tesitura, la red se convierte en una trampa, en una tautología, donde conviven en estrecha intimidad la libertad y la represión y el Big Data no deja de ser el archivo de la gestapo digital del siglo XXI.
[más]
alfonsovazquez.com 
ciberantropólogo

23 oct 2016

Facebook estimula la comunicación

Pensar que usar Faceboook  es gratuito no es del todo correcto. A priori, crear una cuenta de usuario no cuesta nada y no compromete a nada. Pero una vez que comenzamos a interactuar y a operar dentro la red social, nuestra actividad ofrece una información muy valiosa que los algoritmos de la red azul  identificarán, extraerán y trataran de manera que aporte grandes beneficios a la empresa. Las fotos y noticias que subimos y/o compartimos, los me gusta, el texto que incluimos en nuestros mensajes privados... genera un banco de información de dimesiones descomunales. 

Por lo tanto, a más cantidad de datos generados, más posibilidades ofrecemos al prestador del servicio y más transparentes no mostramos ante sus ojos. Hasta tal punto que el chat de Facebook nos comenzará a sugerir temas de conversación con nuestros contactos. Un estimulo para hacernos hablar y para que el gigante telemático nos conozca aún mejor.
alfonsovazquez.com 
ciberantropólogo

19 oct 2016

Las redes sociales están que arden

En la era digital, el periodismo tradicional ha sufrido un duro revés. La prensa tradicional no ha sabido en multitud de casos adaptarse a la influencia de estas nuevas tecnologías que, como ha venido ocurriendo en otros momentos de cambios profundos en la historia de la humanidad, ha condicionado y transformado los modos de pensamiento y los hábitos socioculturales. 

En multitud de ocasiones, los medios convencionales de pequeño calado han desaparecido o se han convertido en entornos de opinión digital. Los más grandes, han buscado conjugar su presencia en papel con el dominio de la transmisión de la información en internet, aún a sabiendas de lo difícil que es controlar el alcance de la misma y del enfrentamiento con los grandes generadores de opinión e información, como puede ser Google y herramienta de información Google News. En un tercer caso, encontramos como grupos de opión extrarradio aprovechan la situación y gracias a la presencia globalizada que ofrece la red, intentan generar "periodismo digital" pero tomando como apoyo casi exclusivamente el principio de autoridad que, para gran parte de los usuarios, ofrece internet.

La nueva prensa establece un perverso vínculo con la redes sociales, a las que a veces inundan de opinión e información y de la que otras veces se nutren rozando la mezquindad. Así, ante la falta de veracidad de una fuente, la prensa remite el mantra de las redes sociales arden para justificar su falta de rigor al robar opiniones parciales y arbitrarias de los internautas. Impunemente toman publicaciones o tuits como medio para justificar la pertinencia de su noticia. 

El vídeo no fue capaz de matar a la estrella de la radio, pero internet seguro que arrastrará y obligará a reinventarse al periodismos de bajo calado.
alfonsovazquez.com 
ciberantropólogo

13 oct 2016

Galaxy Note 7, la bomba de Samsung

El nuevo escenario tecnológico, además de un generador de cambio social de primer orden, se convierte en un boletín comercial global y en un aparato  publicitario que incentiva al consumo conspicuo. No es la primera vez que en este espacio hemos tratado la dimensión casi dogmática de Apple, que tras superar su dimensión tecnológica y comercial se dota de un aura cuasi divina. Android se planteaba como la alternativa pragmática; un sistema operativo libre adoptado, desarrollado y  mejorado por un nutrido grupo de fabricantes que atendían un mercado mayoritario y muy heterogéneo. Así, bajo una interfaz similar, podríamos encontrar desde dispositivos de gamas básicas  fabricadas por desarrolladores desconocidos hasta aparatos punteros presentados por marcas de prestigio. Sin embargo, el fracasado lanzamiento del Samsung Galaxy Note 7 ha supuesto un mazazo para la compañía surcoreana que lleva una caída de casi un 10% en bolsa. A pesar de ello, el prestigio acumulado y la generosa inversión de branding permite un amplio margen de maniobra a la  compañía, que rápidamente se ha mostrado dispuesta a devolver el dinero de los clientes que se hubieran aventurado a comprar el nuevo lazamiento de la marca. 

Pero el hecho marcará un hito en la historia de la marca, pues es la primera vez que un dispositivo de alta gama presenta un fallo de tal calibre. 
alfonsovazquez.com 
ciberantropólogo

Amigos en la red (Últimas actualizaciones)

Archivo del blog