Con la geolocalización, si llevamos nuestro móvil encima es bastante sencillo localizarnos. De hecho hay empresas que venden ya este servicio. Pero en relativamente poco tiempo servirá para sacar perfiles de cada uno de los usuarios y controlar cómo somos. En estos tiempos en que nos venden la importancia de la privacidad, noticias como esta resultan una paradoja: un equipo especializado en inteligencia artificial dirigidos por el profesor Tony Jebara, de la Universidad de Columbia (Nueva York), está poniendo a punto un sistema que permite obtener estos perfiles registrando los movimientos cotidianos del usuario, sin preguntar nada. Todos seremos cómplices de esta intromisión por el sólo hecho de utilizar un teléfono móvil. Tras un tiempo de registro de movimientos, el sistema sabrá si el usuario es hombre o mujer, joven o mayor, rico o pobre, gastoso o economizador...Y como podrán deducir, no se hace ciencia por amor al arte, y la i+d no es gratuita. Para monetizar esta inversión, el equipo ha creado una star-up que ah recibido el nombre de Sense Networks, y que cuenta ya con una quincena de trabajadores repartidos entre NY y California. Anand Venkatamaran, director tecnico de Sense declara que "han logrado crear una plataforma "agnóstica", capaza de digerir cualquier tipo de información".
El sistema será capaz de informar de hábitos alimentarios, hobbies, lugares favoritos y hasta de si el usuario es fiel a sus marcas o le gusta varias. COn estos datos, si el usuario hace una búsqueda en Google, el sistema podrá colocar la publicad que más se adapte a su perfil. Si un usuario coge un medio de transporte todas las mañanas, se le podrá ofrecer un entretenimiento adaptado justo a la duración del trayecto. Pero esto está aún empezando, y a buen seguro en muy poco tiempo habrá muchas más aplicaciones que se beneficiarán de este sistema que nos hará más predecibles y nos incitará a consumir más. Lo más triste, que cuanto más humana sean las máquina, más mecánicos seremos los humanos.
El sistema será capaz de informar de hábitos alimentarios, hobbies, lugares favoritos y hasta de si el usuario es fiel a sus marcas o le gusta varias. COn estos datos, si el usuario hace una búsqueda en Google, el sistema podrá colocar la publicad que más se adapte a su perfil. Si un usuario coge un medio de transporte todas las mañanas, se le podrá ofrecer un entretenimiento adaptado justo a la duración del trayecto. Pero esto está aún empezando, y a buen seguro en muy poco tiempo habrá muchas más aplicaciones que se beneficiarán de este sistema que nos hará más predecibles y nos incitará a consumir más. Lo más triste, que cuanto más humana sean las máquina, más mecánicos seremos los humanos.
alfonsovazquez.com
ciberantropólogo
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