
Hace unos meses, el ayuntamiento de Badajoz (PP) impidió la celebración de un concierto de
SA en Badajoz. Pero ahora un ministerio de cultura socialista ha ido más allá, y ha prohibido que se proyecte en España la película
Saw VI. El cine de terror tendrá más o menos adeptos,
pero no se obliga a nadie a ir al cine. Así que a fin de cuentas, nos están obligando a enchufar la mula y descargarla.
Un
ministerio de cultura putirano y conservador se retrae hasta los tiempos del
régimen franquista y censura una película que ha sido realizada con capital privado (no todas las películas se hacen gracias a subvenciones). Mientras tanto,
regala dinero público para películas de corte pornográfico, como
mentiras y gordas. Vamos, que se le sigue viendo el plumero, que hay que seguir pagando el
no a la guerra, las
fiestecitas de la sgae, y el
Rocamador de Bosé (derecho de pernada de los artistas afines al régimen del soe).
Mientras tanto se permite el
circo mediático nauseabundo (ver la zurrapa mediática
I y
II) que copa los
shares de las falseadas estadísticas de audiencia:
sexo, violencia y desprecio constante a todo aquello que huele a cultura. Como diría la princesa del pueblo - la esteban-
y punto pelota.
Sin embargo no hubo censura en mentiras y gordas, uno de los trabajitos de la ministra, que pudieron ver sin tapujos niños y niñas de toda España.
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